martes, julio 31, 2012

Hijo Bipolar

Hace mucho que no revisaba lo que había escrito hacia atrás, igual fue divertido leer y recordar momentos, personas, amores, en fin. Retrocedí hasta el 2004 y me encuentro con el tercer o cuarto post fechado sábado 24 de julio del 2004 y al leerlo fue tan vivido recordar cada uno de los sentimientos, temores, confusión y desaliento que sentía en aquel momento, asique este nuevo post lo escribo especialmente para mamás de niños bipolares, es un testimonio de esperanza y aliento para todas las que se acaban de enterar que su hijo pequeño es Bipolar. En ese entonces mi hijo tenía 10 años y atravesaba por su segunda gran depresión. Dos años antes, a los 8 lo había diagnosticado como Bipolar. Al conocer el diagnostico también supe que lo había heredado de mi, sin saberlo yo arrastraba una bipolaridad no tratada, que hoy puedo reconocer desde los 4 años. En fin, mi preocupación era el, su niñez, su transito entre depresión y depresión. La Bipolaridad en los menores no es como en un adolecente o un adulto, los niños ciclan entre un estado neutro a uno depresivo, no pasan por estados eufóricos. De hecho yo, jamás me di cuenta que mi hijo tenia problemas, yo interpretaba su aversión a asistir a los cumpleaños de sus amiguitos o primos como un síntoma de niñito mamón, (algo así como, muy apegado a la falda de su mamá). Su falta de interés de jugar en la calle lo interpretaba como una personalidad más bien intelectual, retraída, y anda a saber que otras miles de cosas nunca vi. A finales de marzo 2002 su profesora del colegio me contacta para decirme que mi hijo había olvidado a leer ¡!! 3 meses antes leía sin embargo volvió de las vacaciones y no logro recordar como hacerlo. Ella fue tajante y me dijo: no pierdas el tiempo en sicopedagogas, ni neurólogo ni nada que termine en ologo, ve directamente a un siquiatra, en mi experiencia con niños esto es un signo de depresión grave. Hoy mirando hacia atrás siento que tuve tanta suerte. Han pasado 8 años desde ese post , lleno de incertidumbre y temores, no saber como vendría para adelante la cosa, ¿que pasaría cuando llegara a la adolescencia donde este tipo de enfermedades tiene una alta tasa de suicidio? Hoy quiero contarles que tengo un hijo de 18 años adolecente completamente feliz y absolutamente normal como cualquier otro chico. Me atrevo con toda propiedad dejar algunos consejos para las mamas que inician este camino. 1.- Es importante informarse de la enfermedad, yo me inscribí en todo foro que encontré por internet, leí cada artículo, pasaba horas detrás del PC tratando de saber, sin embargo esto debe tener un límite. Lo que sale por internet son los casos más extremos, raros y poco comunes. El destinar horas y horas a un foro, preguntar y contactar a otras mamas, para mi fue necesario en esa primera etapa, pero me di cuenta que en algún momento mas me asustaba que otra cosa. 2.- No escatimar en pagar todo lo que sea necesario para acceder al mejor especialista en el área, en mi país un buen siquiatra cuesta la mitad de un sueldo mínimo y no existe ningún tipo de ayuda estatal para financiar un tratamiento mental de este tipo. Sin pensarlo vendí mi auto para pagar su terapia y los remedios que en los primeros 5 años fueron una brutalidad en cantidad y precio y sin ninguna duda siento que fue una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida. 3.- No escuchar a la parentela, ni a la vecina ni al marido, solo escuchar y seguir las instrucciones al pie de la letra de tu medico. 4.- Que el niño sepa lo más pronto posible que sufre de un “trastorno anímico”, esa denominación es mucho más fácil de comprender y no acarrea los prejuicios de la palabra Bipolaridad. Lograr la colaboración de la profesora para que el curso y todo su circulo sepa lo que tiene y tratar el tema con mucha naturalidad, así como existen niños diabéticos que se descompensan con el azúcar y se inyectan insulina, existen otros que tienen el animo que se descompensa y se arregla tomando una pastilla todos los días. Esta parte para mi fue lejos la mas compleja, buscar oportunidades con él para conversar sobre esta enfermedad que tendría para toda la vida, hacerlo frente a sus amigos a sus primos a sus tíos y claro sin ninguna colaboración de su padre, quien prefirió hacer como si nada. Para mi fue un proceso doloroso y lo recuerdo como desgarrador, porque es una el que tienen el prejuicio, es una la que no quiere aceptar el diagnostico, es mucho mas fácil y natural querer ocultar para “proteger” a nuestro niño. Hoy se que abrir el tema lo antes posible fue lo que más protegió a mi hijo en su infancia, recuerdo lo natural que fue para Sebastián y para sus compañeros que en las giras deportivas, su profesor le diera el remedio en el desayuno y en la cena delante de todos con una absoluta naturalidad, nada que esconder nada que temer. 5.- En estos años tu hijo tendrán la intención de abandonar los remedios, y para ti será tentador aceptarlo, después de 5, 6 años de estabilidad, uno quisiera comprobar que es sano, ¿y si el diagnostico inicial era errado?, y si probamos un tiempo sin remedios?. Yo estaba compartiendo esta inquietud con mi hermana y no olvidaré su cara de reproche “estas hueona, no puedo creer que pongas en peligro la salud mental de tu hijo, porque tu quieres creer que está sano? Abrí los ojos, cuando uno esta metido no es fácil ver lo que es correcto y lo que no, ese remezón me sirvió mucho para jamás volver a abrir un espacio donde se pusiera en duda la continuidad del tratamiento. Llego la adolescencia, la rebeldía, las discusiones, las negociaciones de limites, el trago, los amigos, sexo, rabia, pena, incomprensión todas y cada una de las fases de cualquier adolecente, pero jamás, jamás se le cruzo un pensamiento suicida. Soy afortunada de haber tenido 8, 9 o 10 años para prepararlo, prepararme para este momento. Lo que pase de ahora en adelante ya corre por su cuenta, es adulto y tomara sus propias decisiones, yo hice lo mejor que pude la mayor cantidad de tiempo posible.

miércoles, julio 18, 2012

Divorcio, Pobre mujer, pobre ex señora Bond.

No hay duda que esta pobre mujer ha tenido el pensamiento o la sensación de que no pudo tener peor suerte desde que me cruce en su vida, se le derrumbo todo por mucho que su matrimonio, su familia, su manera de vivir fuese una completa evasión de la realidad y una fantasía insostenible, pero era la única vida que conocía. Aun no se repone, su falta de herramientas emocionales su incapacidad para reconstruirse la tienen a ella y a sus hijas llenas de rencor, rabia, amargura y frustración, todo por cierto depositado en mi persona. Han pasado 3 años, cumplió 54 y se le seguirá yendo la vida. Lo mas insólito es que me echen la culpa de toda la separación cuando el que los traiciono fue Bond no yo, es mas, si son lectores de mi blog descubrirán que yo hice todo lo que estuvo a mi alcance para que no se separan, consejos sexuales incluidos. No me cabe en la cabeza como Pascuerita (nombre que le puse ya que es igual al viejo pascuero pero con aros) no ha podido mirarse a si mismo y asumir que fue ella quien eligió al personaje, que fue ella quien eligió hacerse la tonta y no poner limites , fue mucho mas fácil y cómodo no querer ver lo que verdaderamente pasaba a su alrededor mientras su marido se gastaba el patrimonio familiar, el de su suegra y de su madre en equipos de música , de cine y bicicletas, mas uno que otro regalito para su amante (moi). Ahora es lo mismo, es mucho más fácil y cómodo poner en mí la explicación de su infortunio. En fin, cada uno resuelve los problemas como puede. Pero esta mala suerte no termina aquí, otra prueba que mi vida es “Mejor que una Novela”, la pobre mujer escogió de todos los abogados que existen en este país, a uno que además de no tener experiencia en juicios de familia, era amigo de la infancia de mi mamá. Su defensa ha sido ridícula, mientras yo contrate a la abogada más zorra sobre la faz de la tierra en temas de divorcio. Aun no puedo creer que esta pobre y tonta mujer tenga ese abogado Otra cosa que ha sido evidente es que desde que se separaron, Pascuerita nunca mas paso un aprieto económico, yo me he encargado personalmente que Bond pague todas las cuentas de las niñas y de la casa, le aporta mas del doble de lo que la ley le fijó como pensión, es mas, pudo ahorrase gran parte de su sueldo para operarse, por segunda vez……., la guata para bajar de peso y tener un aspecto mas aceptable, operación que cuesta lo mismo que un auto nuevo. Creo que en vez de creer que yo le cague la vida debería valorar todo lo que he hecho por ellos, ella bajará 30 kilos y quien sabe si encuentra novio, nunca mas le cortaron la luz, ni el agua, hace años que no tenia una holgura económica como ahora, su hija mayor también fue operada gracias mi presión de lo inaceptable de ser mórbida a los 23 años, ya bajo 20 kilos y quien sabe si consigue que alguien se la atraque como corresponda, las dos cabras chicas reciben terapia semanal y en una de esa logran rectificar el mal modelo comunicacional que heredaron de sus padres. Candy ni tan mala.


Free blog counters