jueves, agosto 31, 2006

De Primera Dama

Es raro lo que me pasa trabajando con Bond y no tiene que ver con él sino conmigo. Me doy cuenta lo distinto que es cuando se tiene una relación de confianza con el jefe directo a cuando no. A mi nunca me paso ser compinche de mi jefe. Esa complicidad el resto la percibe rápido e inmediatamente me colocó en una posición de poder transferido. No se bien como explicarlo, pero en mi historia laboral tuve que ganarme la consideración para ser un referente en ciertos tema y eso lleva tiempo ya que es un tipo de autoridad que se construye en base a historia vivida con el equipo de trabajo o entre pares. Pero ahora no, bastaron dos o tres señales y el grupo automáticamente me confiere una cierta autoridad y esa autoridad otorga poder. Por ejemplo, mi oficina esta a unos 15 metros de Bond, cuando necesita que revisemos algún tema en vez de llamarme directamente por teléfono o a través de su secretaria, el va hasta mi oficina, se instala y varias reuniones terminan siendo ahí. Me llama en diminutivo “Candita” y me puso a cargo de los reportes de gestión. Estos tres movimientos bastaron para que su secre me ofrezca varias veces al día café o coca cola, privilegio solo del jefe, que los subgerentes me incorporen a los almuerzos y happy hours a la semana de llegar. Es cierto que soy una mina con trayectoria y prestigio bien ganado pero nunca como para justificar esta posición automática de jerarquía informal. Pero lo que quería comentar no es lo anecdótico de la posición si no mas bien lo que a mi me pasa con esto. Me sorprendí sugiriendo cambios en el equipo y métodos de trabajo, dándole pautas a Bond de cómo tratar con un par de vendedores (pares míos) puede que sean buenas o malas sugerencias lo que me sorprende en el grado de influencia que puedo llegara a ejercer en tan poco tiempo y como el resto valida sin chistar lo que de mi surja. No es que no me pasara antes pero me llevaba años hacerlo, en cambio ahora fue concedido por obra y gracia y eso es sumamente peligroso ya que es tentador abusar, por otro lado cuando la autoridad se gana, el grupo es condescendiente con los errores, en cambio cuando se otorga es lapidario. La ventaja del poder asignado es que si eres hábil te da una exposición privilegiada y claro tiene mas posibilidades del resto a conseguir rápidos ascensos. En conclusión la frase que siempre odie de “a quien se tiro esta mina para llegar ahí tan rapido” para mi sorpresa tiene asidero real.

Candy .

2 Comments:

Blogger Unknown said...

Uffff!!....fuerte el escenario, como bien dices, deben haber varios y varias que tienen sendos nudos en sus sábanas, haciendo pilatos para que te pegues un patinazo!!...
Atravez de la historia, sólo los procesos evolutivos logran el exito, los procesos revolucionarios no....
Osea evolución=exito, Revolución=fracaso
Si bien estás en una posición de autoridad, debes pensar en todo minuto que estás camino sobre un campo minado, y eso es bastante preocupante, por lo tanto, para ser la mujer del César no solo hay serlo, sino que parecerlo...opino que ya una vez metida en el baile, debes ostentar y asumir tu nueva posición, si dudas, verás como se te tirarán muchos a devorarte

septiembre 01, 2006 8:20 a.m.  
Blogger Enzo Antonio said...

Bueno te felicito por lograr tan rápido lo que te llevaba un tiempo. Lo importante es que seas bien aterrizada y logres ventajas laborales en el sentido que tienes una excelente oportunidad de mostrarte y que conozcan tus aptitudes. Todo tranquilamente.
Suerte.

septiembre 09, 2006 8:27 p.m.  

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